La WONCA es una gran familia: miembros y amigos de todos los sitios del mundo celebran su Fin de Año en momentos muy distintos. Dado que yo he crecido dentro de la cultura china de Hong-Kong, para mi, el Año Nuevo Lunar (popularmente conocido como el Año Nuevo Chino) siempre ha sido mi festividad favorita.

La Fecha del Año Nuevo Chino acostumbra a coincidir con un día de finales de enero o principios de febrero y, aquí, acostumbramos a dejar de lado nuestro ajetreado trabajo, nuestras funciones laborales y nuestras citas para pasar tiempo con nuestras familias y amigos. La gente suele quedarse en casa donde hacen fiestas familiares, una fiesta tras otra, y donde disfrutan de la “obligatoria” comida tradicional china. Mis sensaciones con respecto al Nuevo Año Lunar están llenas del sabor de los pasteles de zanahoria al vapor y las albóndigas de arroz con sopa de jengibre.

Muchos pacientes nos traen dulces, chocolate y galletas. El centro de salud donde trabajo siempre está lleno de las cestas que nos regalan los pacientes y, tanto a mi como a mis colegas, nos cuesta varias semanas terminar toda la comida que nos dan. Nuestro ritual de Año Nuevo consiste en visitar a amigos y familiares, y cuando nos saludamos, nos deseamos lo mejor los unos a los otros, (y estos deseos siempre tienen que ser sinceros y claros). Entre los miembros de más edad de nuestra generación, la frase que más comúnmente nos decimos es “Kung Hei Fat Choy”, que significa “te deseo fortuna”. Las nuevas generaciones han tomado una mayor conciencia acerca de su salud y muchos de nuestros jóvenes han cambiado la forma de desearse un feliz Año Nuevo ya ahora dicen “te deseo una buena salud” o “deseo que estés sano como un dragón y fuerte como un caballo”. Sin duda, este es un cambio positivo, y muestra que muchos de nosotros nos vamos dando cuenta de que la salud es más importante que el dinero.

El Año Nuevo Lunar es también una época en la que nuestro sistema de salud se encuentra bajo un gran estrés. Ya que la mayor parte de las clínicas ambulatorias administradas por el gobierno cierran durante las largas vacaciones, los departamentos públicos de Accidentes y Emergencias que están abiertos 24 horas al día se convierten en los sitios donde van los pacientes en caso de necesitar asistencia. Muchos pacientes mayores enferman durante la estación de la gripe y llenan las habitaciones disponibles en Urgencias. Como resultado de esto, tanto los profesionales en asistencia sanitaria como los pacientes se sienten insatisfechos – los médicos se sienten frustrados porque los servicios de urgencias están siendo utilizados para tratar dolencias menores, como por ejemplo resfriados comunes y malestares digestivos, mientras que algunos pacientes se quejan de que tienen que esperar más de 8 o incluso 12 horas para poder ser visitadas por un médico.

Este fenómeno ilustra cómo de importante es tener una red de Atención Primaria fuerte basada en la actividad comunitaria. Muchos otros países se están enfrentando a esta misma clase de problemas – mientras los gobiernos invierten muchos recursos en hospitales y en servicios especializados, el gasto en Atención Primaria y en la prevención en salud es mucho menor. Otro de los problemas a los que se enfrentan muchos sistemas de asistencia sanitaria es el de la fragmentación debido a que los sectores públicos y privados no colaboran y ni se ayudan lo suficiente. La situación del Año Nuevo Lunar en Hong Kong es un ejemplo clásico de esto: mientras los médicos del sector privado se encuentran de vacaciones, el sistema público está saturado de pacientes y no puede soportar el exceso de la demanda.

No podemos esperar que los pacientes trabajen sin parar durante todo el año – los médicos también necesitan descansar y también tienen familias de las que cuidarse – pongamos más atención en el equilibrio entre el trabajo y la vida. No obstante, los servicios sanitarios padecen de altos niveles de demanda. En los últimos años, diversos grupos privados de práctica médica en Hong Kong están haciendo un gran esfuerzo para difundir información sobre la situación de los médicos que mantienen sus clínicas abiertas durante las vacaciones. La prevención siempre es mejor que la cura, y estamos orgullosos de ver como nuestro Gobierno está poniendo más recursos en medidas preventivas como por ejemplo las de promover las vacunaciones de gripe para conseguir reducir los casos durante el periodo invernal. De todos modos, hay que poner en práctica una mayor planificación y mejores políticas cuando la demanda de los servicios médicos crece.

La Organización Mundial de la Salud ha apoyado recientemente la Declaración de Astaná y ha vuelto a alertar de que los recursos sanitarios se han focalizado excesivamente sobre intervenciones en enfermedades concretas en comparación con la filosofía de los sistemas sanitarios que asisten a los pacientes desde una visión global. Construir una asistencia sostenible basada en la Atención Primaria es uno de los elementos clave para una mejor asistencia sanitaria en todo el mundo. La WONCA está jugando un papel muy importante para que se escuche su mensaje y para que sus políticas puedan llevarse a cabo.

 

Os deseo a todos y a todas buena salud y un Feliz Año. “Kung Hai Fat Choy”.

 

Donald Li

Presidente de la WONCA